El sueño de Neverland

**rosa mj** Sáb Nov 19, 2011 6:01 pm

Neverland era el sueño de Michael. Cuando lo compró en 1988, ya tenía ese sueño. Vio en él un lugar donde los niños y él, y cualquiera con el corazón de un niño, pudieran recuperar al niño que habita en nuestro interior. Neverland fue ese lugar soñado.

Pero había otro sueño para Neverland que no pudo hacer realidad. David Nordahl estaba en Chicago hace un año en un convención de fans en la que habló sobre el trabajo artístico que Michael le encargó. Pero no todo eran retratos. A menudo le pedía que dibujara los sueños que tomaban forma en su mente creativa. Uno de esos sueños era construir un hogar para niños enfermos y terminales en Neverland.

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Todos esos que aún dos años después continúan mintiendo y perpetuando ideas falsas tienen una responsabilidad. Si tuvieran que aceptar la verdad de que Michael Jackson era un hombre inocente tratando de navegar por este cínico mundo, tendrían que enfrentarse a sus propias sombras. Tendrían que aceptar su complicidad en la muerte de un hombre inocente.

Es imposible de aceptar por esa misma gente que Michael Jackson tenía magnetismo por quién era, no por lo que hacía. Nunca le vieron de cerca, nunca le escucharon ni leyeron las letras de sus canciones, ni le entendieron. Miraban a Michael y veían su propio criterio, el reflejo de sí mismos y lo que ellos eran en este mundo.

Era la energía y el aura de Michael las que hablaban bien alto a la gente, no el modo en que se vendía a sí mismo. Esa clase de cosas no se pueden falsear. No puedes crear una calidad así si no existe ya. No puedes esperar que la gente reconozca amor incondicional hacia alguien si no tienen una referencia en sus propias vidas para experimentarlo. Es lo que Michael siempre decía: “Lo que les pasa es que necesitan más amor.”

Pero es muy difícil mirar al espejo y ver al propio monstruo tenebroso reflejado en él. Si te aproximas a esta gente con ira y acusación, solo consigues de ellos una negativa. Hacer que se miren al espejo es como sujetarles la cabeza dentro del agua. Necesitan imperiosamente un soplo de aire.

David Nordahl entregó a Michael los bocetos que le había pedido sobre el sueño de Neverland. Consistía en una serie de residencias que se asemejaban a nidos en un inmenso árbol. Cada residencia tenía una ventana al exterior con una despejada vista de Neverland, con teatro al aire libre mirando al paisaje. Estarían amuebladas con camas y equipamiento hospitalario. Las camas estarían emplazadas frente a la ventana para que los ocupantes pudieran ver claramente la pantalla de cine del teatro.

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Algunas personas que describieron Neverland recuerdan la pantalla exterior de cine y cómo exhibía extrañamente dibujos animados a una audiencia invisible y lo fantasmagórico que eso parecía. Lo que no conocían era la mente y el corazón de Michael Jackson: La razón de esas residencias era hospedar, gratuitamente, a niños gravemente enfermos y terminales junto con sus padres en Neverland.

Michael tuvo mucha experiencia alojando a niños en Neverland y fue testigo de primera mano de cómo eso podía ser una experiencia que cambiaba sus vidas. Enseñó a muchos niños acerca de cómo usar afirmaciones (declaraciones escritas y repetidas) y a usar la meditación en forma de visualizaciones para crear una nueva realidad y derrotar a la enfermedad. También observó cómo con la música apropiada que salía de los altavoces de Neverland, las flores crecían mejor y más bonitas y el césped era más verde y exuberante.

Sabía que la risa es la mejor medicina, que el humor cura, que las emociones negativas hacen daño, mientras que las positivas curan el cuerpo. Es bastante posible que supiera del efecto de los iones negativos en el estado de ánimo. Neverland tenía fuentes por todas partes. Las cascadas producen iones negativos; esa es la razón por la que estar cerca de un manantial nos hace sentir bien.

La pantalla de cine estaba programada para reproducir dibujos animados día y noche, continuamente. Michael sabía que los niños que están enfermos se despiertan a menudo por la noche asustados y eso niños tendrían algo divertido que ver y así poder olvidar sus problemas. Michael enseñó todos esos métodos de visualización y meditación a muchos niños, incluido aquel que acabó acusándole. Michael no hizo daño a los niños; Michael fue un sanador.

¿Quién sabe qué avances en la medicina habrían surgido a raíz de este proyecto? Las investigaciones no tuvieron lugar porque este experimento no tuvo lugar. Gracias a los actos egoístas de unas cuantas almas oscuras y arrogantes centradas solo en sí mismas y que destruyeron el sueño de Neverland, los niños no pudieron curarse.

Aquellos que no conocen toda la historia se rien. Muchos se burlan del hombre que sabía más de lo que ellos podrían jamás imaginarse sobre la curación y alternativas de tecnología punta que trabajan en la remisión y la curación de las enfermedades. Tecnologías que se usan en la mayoría de los hospitales hoy día. Michael Jackson las estaba introduciendo a finales de los ochenta y principios de los noventa.

El centro curativo planeado en Neverland nunca fue construido por el egoísmo de un hombre que quiso utilizar a Michael Jackson para su lucro personal y fue en contra de él en venganza por no conseguir lo que quería. Quería la bancarrota de Michael, destruirle a él y a su carrera y Michael sospechó que estaba siendo utilizado y se negó.

David Nordahl dijo que Sony iba a financiar la clínica planeada. Dijo que cierto individuo esperaba ser socio en el negocio y cuando eso no sucedió, se enfureció y fue en contra de Michael con el más sucio de los abogados.

El dinero que iba a financiar el sueño de Neverland sirvió para pagar un acuerdo fuera de los tribunales. Después, el niño que acusó a Michael con la ayuda de otros contratados por su padre, demandó y obtuvo la emancipación de sus padres. Ese padre atacó a su hijo y se convirtió en un extraño para él, contrajo una enfermedad y se suicidó poco después de la muerte de Michael.

Hay quienes se ríen todavía a expensas de Michael. Piensan que el sueño de Michael de “Salvar al mundo” “Salvar a los niños” era el sueño de una excéntrica estrella del pop. Son los mismos que olvidan que en 1985, el proyecto “We Are the World” liderado por Michael Jackson, alimentó a la mayoría del África hambrienta, y más adelante, a la mitad del mundo.

Los mismos que olvidan que Michael inició la tendencia de las estrellas del rock hacia los logros humanitarios. Los mismos que no saben que los conciertos de Michael Jackson and Friends recaudaron millones para causas sociales.

Esos deben ser los que se olvidan, los detractores, los que odian, los que leen los tabloides y los creen, y los que evitan mirarse al espejo y preguntarse silenciosamente frente a él: ¿Y quién eres tú en este mundo?

Las referencias a Neverland, las acusaciones y el dinero pagado continúan rondando el legado de este hombre. Pero eso no cambia la verdad: el dinero pagado en el caso de 1993 estaba destinado a pagar un centro curativo para niños gravemente enfermos y terminales, era un regalo para ellos, para sus padres y para el mundo, de parte de Michael Jackson. Era el sueño de Neverland.

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http://www.innermichael.com/2011/06/heartbreak-and-neverlands-dream/